2039.- ÉL
ES EL QUE NOS AMA
Nos quejamos de los límites que padecemos, de
no poder obrar como queremos, etc., pero ni por un instante se nos ocurre
pensar sobre los límites que le imponemos a Dios.
Ahí debemos comenzar a buscar la causa de
todos los males, entorpecimientos, trabas, etc., porque al limitar a Dios,
comenzamos a perjudicarnos. Esto es así porque al ponerle límites, nos privamos
de Él, y como Él Es La Vida, nos privamos de Vida, comienza la muerte, comienza
la desolación.
En vez de andar quejándonos, haciendo
escándalos y berrinches, debemos considerar helecho de que estamos oponiéndonos
a Dios, entonces, ¿Cómo nos puede ir?.
Nos oponemos a Dios consciente o
inconscientemente porque nos empeñamos en concretar nuestra voluntad, nos
dedicamos a satisfacer el ego, conformar los caprichos, etc., y eso entra en
rivalidad contra Dios.
Estamos oponiéndonos a Él incluso no
queriéndolo y hasta diciendo que no lo hacemos, simplemente porque ni siquiera
advertimos que nos hallamos en rebeldía contra Su Voluntad.
Dios no quiere algo para oprimirnos,
reprimirnos o esclavizarnos, ya somos granes para sostener semejantes
estupideces, Dios Es Dios, Es Nuestro Creador, si quiere algo, lo quiere como
Padre, por y para Nuestro Verdadero y Eterno Bien.
El problema es que fácil y prontamente lo
acusamos, queremos creer que nos perjudica porque nos corrige o limita, somos
unos adolescentes caprichosos, soberbios, vanidosos, tercos y testarudos que
reniegan del hecho de que Dios nos corrija.
Si Dios quiere algo, no es para perjudicarnos,
eso lo creemos porque estamos apegados a vicios, ambiciones, perversiones,
caprichos, etc., estamos dando vueltas las cosas, los que nos perjudicamos
somos nosotros y no Él, Él Es El Que nos
Ama, y no nosotros que conspiramos con satanás para corrompernos, rebelarnos, perjudicarnos
ahora y para siempre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario